El ejercicio físico en el embarazo: beneficios y recomendaciones esenciales
La práctica de ejercicio físico durante el embarazo es una de las mejores formas de promover el bienestar tanto de la madre como del bebé. Sin embargo, persisten dudas y mitos sobre si esta actividad es segura o no. A continuación, te explicamos los beneficios, consejos y precauciones que debes tener en cuenta para mantenerte activa durante esta etapa.
¿Es seguro hacer ejercicio durante el embarazo?
Según el VII Estudio Cinfa Salud, avalado por la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), el ejercicio moderado es altamente beneficioso para las mujeres embarazadas. En contraste, el 0,4 % de las gestantes realiza deportes de riesgo o actividades de alta exigencia, prácticas no recomendables debido a posibles complicaciones.
El doctor Julio Maset, médico de Cinfa, afirma que la práctica regular de ejercicio moderado favorece la evolución del embarazo, mejora el bienestar de la madre y prepara el cuerpo para el parto, lo que facilita una recuperación más rápida. Además, recalca que las recomendaciones actuales están respaldadas por evidencias científicas, dejando atrás opiniones basadas en tradiciones culturales.
Lo que dice la ciencia sobre el ejercicio en el embarazo
Estudios recientes han demostrado que:
- El ejercicio no aumenta el riesgo de aborto espontáneo.
- No existe evidencia para recomendar el reposo absoluto como método para prevenir el parto pretérmino.
- Un programa adecuado de ejercicio físico puede ser seguro y beneficioso, siempre que esté adaptado a las condiciones de cada mujer.
Beneficios del ejercicio físico durante el embarazo
La actividad física no solo no es perjudicial, sino que ayuda a prevenir y mejorar múltiples condiciones relacionadas con el embarazo:
- Ansiedad y depresión postparto.
- Dolor lumbar.
- Incontinencia urinaria.
- Ganancia excesiva de peso.
- Diabetes gestacional.
- Trastornos hipertensivos.
- Parto pretérmino.
- Cesáreas innecesarias.
- Bajo peso del bebé al nacer.
Además, incrementa la probabilidad de un parto vaginal natural y mejora el tono muscular, la digestión, la circulación y el control del peso.
Recomendaciones para practicar ejercicio físico seguro en el embarazo
Consulta médica previa
Antes de iniciar cualquier programa de ejercicios, consulta a tu ginecólogo o matrona para evaluar posibles riesgos. Condiciones como anemia, hipertensión gestacional, embarazo múltiple o antecedentes de partos prematuros podrían requerir modificaciones específicas en tu rutina.
Diseña un programa específico para gestantes
Es recomendable participar en programas supervisados por profesionales especializados en ejercicio para mujeres embarazadas. Estos programas se enfocan en mejorar la resistencia, la flexibilidad, el equilibrio y el fortalecimiento muscular, incluyendo ejercicios para el suelo pélvico.
Consejos clave para mantenerte activa durante el embarazo
Actividades recomendadas
Opta por ejercicios de intensidad moderada que se adapten a tu condición física. Entre las mejores opciones se encuentran caminar, nadar, yoga prenatal, pilates y ejercicios de bajo impacto.
Ejercicios a evitar
Evita deportes de contacto, ejercicios de alto impacto y actividades que impliquen riesgo de caídas o movimientos bruscos. También, descarta las posturas que generen tensión en zonas sobrecargadas, como el decúbito ventral (boca abajo).
Distribución semanal del ejercicio
La evidencia científica sugiere realizar al menos 150 minutos semanales de actividad física moderada, distribuidos en tres o más días. Idealmente, dedica tiempo diario a mantenerte activa.
Hidratación y ambiente
Es fundamental mantener una hidratación adecuada antes y después del ejercicio. Asimismo, evita practicar actividades en ambientes de alta temperatura o humedad excesiva.
Señales de alarma
Interrumpe el ejercicio si presentas:
- Dificultad respiratoria.
- Mareos o desmayos.
- Dolor de cabeza persistente.
- Sangrado vaginal.
- Contracciones uterinas regulares y dolorosas.
El ejercicio físico durante el embarazo no solo es seguro, sino que ofrece múltiples beneficios para la salud de la madre y el bebé. Consultar con un profesional, mantener una rutina moderada y prestar atención a las señales del cuerpo son las claves para disfrutar de una gestación activa y saludable.
Si te encuentras embarazada, no dudes en buscar orientación profesional para diseñar un plan de actividad física adaptado a tus necesidades. ¡Tu cuerpo y tu bebé te lo agradecerán!